"EL SECRETO DE MARROWBONE" êê
Debut de Sergio G. Sánchez, guionista habitual de J. A. Bayona (El
orfanato,
Lo
imposible)
con una historia que nos sitúa en la América rural de 1969, y que nos presenta
a cuatro jóvenes hermanos, Jack
(George MacKay), Billy (Charlie
Heaton), Jane (Mia Goth) y el
pequeño Sam (Matthew Stagg) lleguen
a Marrowbone junto a su madre, Rose (Nicola Harrison). Escapan de Inglaterra
con el objetivo de dejar atrás a su padre, un hombre violento y con un terrible
pasado criminal. Ahora, en aquella casa abandonada esperan iniciar una nueva
vida partiendo de cero. Muy pronto entablan amistad con Allie (Anya Taylor-Joy) la joven bibliotecaria local. Cuando la
madre fallece, temen ser deportados y separados, será entonces cuando una
amenazadora presencia comience a rondar su casa.
Fábula gótica muy influenciada por el cine
de Bayona, El secreto de Marrowbone surca los cánones y clichés del género
(caserón espectral y herrumbroso en cuyas siniestras estancias anida el Mal,
estigmas y traumas familiares, celos y lazos enfermizos) para armar un arco
dramático que aunque carece de la intensidad y emoción necesaria contiene una
innegable fuerza visual. Un problema es su ambición multigenérica, inabarcable
cuando el enigma esconde demasiadas preguntas y lagunas de guión.
La factura de la función es impecable y
Sergio G. Sánchez demuestra conocer el oficio desplegando un estilo depurado,
sabe dónde colocar la cámara y acierta con la combinación plano-contraplano para crear tensión, para lograr el juego de luces y sombras
tan esenciales. A pesar de contar con buenos elementos narrativos, El secreto de Marrowbone decepciona en
su twist final, muy influenciado por Shyamalan, un giro bastante endeble con el
que el director quiere poner la firma de autor y que por el contrario emborrona lo que
podía haber sido un terrorífico cuento moral.