1-LA EVASIÓN
(LE TROU)
(JACQUES BECKER,
1960)
La
evasión es para quien esto firma la mejor película europea de la
historia. Dirigida por Jacques Becker
en 1960 (que murió sin poder asistir al estreno) nos narra la entrada en
prisión de un hombre inocente acusado de intentar matar a su mujer. Un film que
está basado en las vivencias reales del escritor y guionista José Giovanni, y se eleva como una
lección magistral de la pureza del cine: actores semiprofesionales, un guión
compacto pero sencillo, iluminación y escenarios naturales, modestos pero
eficaces efectos de sonido… Todo rodado con una óptica de ingeniero y una
intensidad angustiosa, con una lucidez que raya lo pristino. Una obra magistral
que pone en valor la solidaridad, la organización colectiva, la ética
libertaria y condena la traición como un recurso dramático demasiado humano.
2-EL SILENCIO DE UN HOMBRE
(LE SAMURAÏ)
(JEAN-PIERRE MELVILLE, 1967)
Una de las cumbres del maestro Jean-Pierre Melville. Un estilo descriptivo y minucioso al que
la perfecta fotografía en eastmancolor de Henri
Decae hace brillar, consiguiendo planos inolvidables que han pasado a
formar parte de nuestra insustituible memoria cinematográfica. De una historia
con apariencia de thriller rutinario, el director de El confidente consigue una obra maestra,
objetivo al que ayuda el excelente dibujo de killer silencioso que con tanta sobriedad
recrea Alain Delon, a quien afectó
tanto el papel que acabó encasillándose en personajes semejantes.
El silencio de Jef Costello nace
del dolor íntimo del samurai, todas las acciones, hasta las más
insignificantes, las desarrolla siguiendo las reglas de un meticuloso ritual,
su descanso lo emplea para meditar sobre la trascendencia de una muerte que se
avecina, tan cercana como su soledad, tan profunda como el suicidio. El hombre
recluido, algo tan oriental -de ahí su título original- viviendo con la única
compañía de un canario que le aporta calma con su monótono piar, lo que le
sirve a Melville para mostrar/simbolizar la poca confianza que tenemos en
nuestra especie y la inabarcable soledad que rodea al ser humano.
3-EL
CONFIDENTE
(LE DOULOS)
(JEAN-PIERRE
MELVILLE, 1962)
La
primera obra maestra que Melville
aportó al género y uno de los primeros trabajos de Jean-Paul Belmondo. Con un guión que adapta la novela de Pierre Lesou, es la historia de un confidente cuya amistad se reparte entre un policía y un
delincuente. Melville coloca a los personajes en un conflicto moral en donde no
siempre la opción elegida es la mejor, desplegando un suspense tan físico y cercano que implica al
espectador, al que manipula y engaña, igual que a su protagonista. Los dilemas
de los personajes se debaten entre la lealtad, el honor y la traición a pesar
de la atmósfera glacial propia del género.
4-LA
NOVIA VESTÍA DE NEGRO
(LA MARIEE ÉTAIT EN NOIR)
(FRANÇOIS
TRUFFAUT, 1968)
Al abandonar la iglesia tras su boda, Julie Kohler, la gran Jeanne Moreau, presencia cómo su marido
es abatido a tiros por un francotirador. Decidida a vengar su muerte, emprende
la búsqueda de los responsables y los va matando uno tras otro. A alguien le
suena esta premisa ¿a Kill Bill, tal vez? Nada extraño viniendo de Tarantino. Sí, fue una de sus influencias para la película protagonizada por Uma Thurman. Con música
de Bernard Hermann, el sexto largometraje de François Truffaut está dividido en cinco partes que se corresponden con
el número de individuos que han colaborado en el asesinato del marido de Julie.
Un film de tono hitchcockiano y con el protagonismo de una magnífica Moreau dando oxígeno a una heroína
enigmática, distante y fría que ya sólo tiene un objetivo en la vida: la
venganza. Resultan muy atractivos los cambios de escenarios naturales y los ajustados
flash backs que explican las claves del pasado. Un film de atmósfera densa y
sombría. Un film cojonudo.
5-ÚLTIMO
DOMICILIO CONOCIDO
(DERNIER DOMICILE CONNU)
(JOSÉ
GIVANNI, 1970)
Uno de los grandes títulos del ex
convicto, escritor, guionista y director José
Giovanni, figura esencial del polar francés que en esta ocasión adapta una
novela del especialista norteamericano Joseph Harrington trasladando la acción
de Nueva York a París. Con el protagonismo de Lino Ventura en uno de sus mejores papeles (otra figura cardinal
del policíaco francés) en la piel de un rudo y competente policía que arresta
fortuitamente al hijo de un influyente abogado, que promete vengarse. El film
es ante todo una crítica al sistema legal y al cuerpo policial, poniendo en
evidencia sus fríos mecanismos humanos.
6-CÍRCULO
ROJO
(LE CERCLE ROUGE)
(JEAN-PIERRE
MELVILLE, 1970)
Penúltima película de Jean-Pierre Melville y una de sus obras más celebradas, un trabajo para el que
cuenta de nuevo, y no sería la última vez, con el mítico Alain Delon. El film sigue a Corey (Alain Delon), que sale de
prisión tras cumplir condena en una cárcel francesa. Vogel (Gian-Maria Volonte)
un criminal custodiado por el temible comisario Mattei (André Bourvil) escapa
del tren en el que viajan. Después de robar a un antiguo socio, Corey se
encuentra con Vogel y le propone formar un equipo para realizar un meticuloso
robo de joyas. Nueva crónica de un fracaso, otra tragedia griega que se eleva
una sentida oda al honor y la amistad. Todo el film está barnizado por un agudo
pesimismo, por la profunda dignidad del héroe consciente de su fatal destino. Magnífica
toda la secuencia del atraco a la joyería y la lógica interna de un relato en
donde la lealtad es estilo de vida y la genuina misantropía del director resulta evidente. Obra maestra
redonda, total y absoluta.
7-A
TODO RIESGO
(CLASSE TOUS RISQUES)
(CLAUDE
SAUTET, 1960)
Segundo film de Claude
Sautet basado de nuevo en una novela del omnipresente José Giovanni y con la presencia de la que iba a ser otra de las
figuras ubicuas del género, Lino Ventura.
El film nos presenta a Abel Davos (Jean-Paul Belmondo) un conocido criminal
italiano que huye a Francia para evitar su arresto y una condena a muerte. Davos
va acompañado por su fiel amigo, Raymond Naldi (Lino Ventura) otro criminal
perseguido por la justicia. Algo emborronada por su apresurado desenlace,
estamos ante un film excelente en donde las tremendas interpretaciones superan
esta vez a un libreto que se queda algo corto y una trama en la que, de nuevo, la traición y la venganza moldean su arco dramático.
8-ASCENSOR
PARA EL CADALSO
(ASCENSEUR POUR L´ÉCHAFAUD)
(LOUIS
MALLE, 1957)
Ópera prima en solitario de Louis Malle ¡y qué debut! Mesías de la
Nouvelle Vague, el realizador francés convierte una novela de Nöel Calef en un
superlativo ejercicio hitchcockiano que narra la historia de Julien Tavernier
(Maurice Ronet) un héroe de la guerra de indochina que trabaja para un
industrial y es el amante de su esposa, Florence (Jeanne Moreau). Para poder
vivir juntos, los amantes deciden matar al marido de modo que parezca un
suicidio, pero ocurre algo que no estaba previsto. Derrochando toneladas de
amor al género y una cámara impenitente que retrata a Ronet y Moreau en todo
su esplendor, Malle construye una intriga cargada de ironía y romanticismo. Una
ciudad para los amantes, París, enredada en las cuestiones sociopolíticas de la época y
maravillosamente iluminada.
9-RIFIFÍ
(DU RIFIFI CHEZ LES HOMMES)
(JULES
DASSIN, 1955)
Entre las 100 mejores películas de todos los tiempos, el director
norteamericano Jules Dassin, fugado
a Francia por estar su nombre en la Lista Negra, empeña toda su sabiduría para
construir una obra maestra de dimensiones estratosféricas ateniéndose a la
tradición y constantes del cine galo. Tras cumplir una condena, Tony Stephanois
(Jean Servais) quiere cambiar de vida pero se encuentra con que su amante está
con un gángster. Sin recursos económicos, no le queda más remedio que volver a
las andadas. Durante semanas prepara junto a sus compinches el golpe perfecto a
una inaccesible joyería de París. Componiendo algunas de las secuencias más
imitadas del género, Dassin crea la que es sin duda la obra magna del golpe
perfecto dotando a la función del fatalismo propio del género y anudando la
historia con la huella inalterable de la amistad y el sacrificio.
10-FLIC
STORY (HISTORIA DE UN POLICÍA)
(COP STORY)
(JACQUES
DERAY, 1975)
Me gusta mucho
esta película de Jacques Deray a
pesar de que el grueso de su filmografía, excesivamente comercial, nunca me ha
entusiasmado a excepción de la mítica Borsalino. Con sabor a polar, Flic
Story sigue a Roger Borniche (Alain Delon) un policía distinto a los
demás: no lleva armas e incluso los gángsters le escriben para agradecerle su
humanidad. Sin embargo, Emile Buisson (JeanLouis Trintignant) es un criminal
que no duda en matar a sus propios cómplices. Los dos acabarán enfrentándose en
un fantástico duelo. Adaptando uno de los populares libros autobiográficos de
Roger Borniche al que da vida Delon, Deray crea un polar clásico manejando con
soltura los códigos del género, correctamente ambientado y magníficamente
interpretado. Vamos, lo que se llama oficio de artesano, oficio para recrear la acción y estilo y para dotar de gelidez, laconismo y carisma a sus protagonistas.
11-EL CLAN DE LOS
SICILIANOS
(LE CLAN DES SICILIENS)
(HENRI VERNEUIL,
1969)
Henri Verneuil logra uno de los
mayores éxitos del policíaco francés al reunir a tres de las grandes estrellas
del cine francés; Alain Delon, Jean Gabin y Lino Ventura. El film sigue a George Santet (Alain Delon) que ha
sido encarcelado por asesinato, pero el clan siciliano dirigido por Vittorio
Manalese (Jean Gabin) lo libera. La banda tiene como objetivo apoderarse de
unas joyas de una exposición que tiene lugar en Roma. A través de un amigo
americano, llegan a la conclusión de que la mejor forma de hacerse con el botín
es asaltar el avión que las transporta desde Nueva York. Pero el tenaz
inspector Le Goff (Lino Ventura) intentará desbaratar sus planes. Basada en la
novela de August Le Breton, Verneuil construye el cóctel perfecto con una
mezcla en buenas dosis de acción, drama mafioso y romance. La trama no da un
momento de respiro y los cambios de escenario (París, Roma, Nueva York)
resultan muy sugerentes. Tan atractivos como Delon, de nuevo en el rol que mejor le
sienta de tipo soltero, reservado, hierático, lacónico y distante.
12- POLICÍA PYTHON 357
(POLICE PYTHON 357)
(ALAIN CORNEAU, 1976)
Primera entrega
de la Trilogía Negra de Alain Corneau compuesta además por Serie Negra y Les
choix des armes. El film nos presenta al comisario de Orleans Marc
Ferrot (Yves Montand) que debe su privilegiada posición social a su rica e
influyente esposa, Therese Gànay (Simone Signoret) que lleva años postrada en
una silla de ruedas. El comisario, con el conocimiento de su esposa, tiene una
joven amante con antecedentes penales. Un film espléndido construido con indisimulada
influencia de Melville y un excelente retrato por parte de Yves Montand del estereotipo
de policía galo duro pero humano siempre pegado a su Colt mágnum 357. La muerte
de la amante mutará el carácter de los personajes, sobre todo de un desolado
Montand bajo el signo premonitorio de la derrota y la tragedia. Espléndida música
de Georges Delerue.
13-A PLENO SOL
(PLEIN
SOLEIL)
(RENÉ CLÉMENT, 1960)
La primera y mejor versión cinematográfica de "El talento de Ripley" de Patricia
Highsmith mostrándonos a un Alain Delon
bello, inaccesible y dando el do de pecho como Tom Ripley, un cazafortunas
enviado a Europa por un multimillonario para encontrar a su hijo Philip Grenleaf (Maurice Ronet) un playboy mimado, y llevarlo de vuelta a Estados
Unidos. A cambio recibirá 500.000 dólares. Pero Philip engaña a Tom haciéndole
ver que está dispuesto a volver, sin embargo, no tiene ninguna intención de
dejar a su prometida y volver con su padre. Mítica resulta ya la interpretación
de Delon dando vida al amoral Ripley, capaz de cualquier cosa con tal de saciar
sus ambiciones. Una obra maestra rodada por Clément con oficio, sin efectismo y con la insuperable aportación
de la música de Nino Rota y la luz
de Henri Decae. Un film que asume
con desesperanza y frialdad las debilidades de la condición humana