Páginas

viernes, 8 de junio de 2012

MIS PELICULAS FAVORITAS: TERCIOPELO AZUL


"TERCIOPELO AZUL
(BLUE VELVET)
(BLUE VELVET)
Thriller - EE. UU. - 1986 - 120 Minutos.
DIRECTOR: DAVID LYNCH.
INTÉRPRETES: KILE MACLACHLAN, ISABELA ROSSELLINI, DENNIS HOPPER, LAURA DERN, DEAN STOCKWELL.

     
      Considerado un director de culto, David Lynch nace en Montana en 1946, cursa estudios de Bellas Artes y realiza varios cortos, para ganarse la vida trabaja, entre otras cosas, como repartidor de periódicos. En el año1972 comienza el rodaje de su ópera prima, Cabeza Borradora, estrenada finalmente en 1976 es un sorprendente, extraño e inclasificable film que impresiona a Mel Brooks y le lleva a producirle su segundo largometraje, El hombre Elefante (1980) que consigue siete nominaciones a los Oscars. Su siguiente trabajo es Dune (1984) un cuento futurista que resulta un fracaso comercial. La que para mi es su más grande obra maestra, TERCIOPELO AZUL, funciona mejor en Europa que en América, desde donde se tacha a este singular autor de morboso y oscurantista. Con Corazón Salvaje (1990) ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes.

     
      Jefrey (Kile Maclachlan) regresa a su casa tras visitar a su padre, ingresado en un hospital como consecuencia de in infarto, en su camino encuentra una oreja humana cubierta de insectos entre unos matorrales, la envuelve en un papel y la entrega en la comisaría. Una noche, cuando sale a dar un paseo conoce a Sandy (Laura Dern) la hija del detective que le atendió en la comisaría, ésta le cuenta que las pistas sobre el caso de la oreja cercenada conducen hasta una cantante, Dorothy (Isabela Rossellini). Un día, Jefrey consigue introducirse en el apartamento de la cantante y ésta le descubre escondido en el armario, amenazandole con un cuchillo le tumba en el sofá, le besa, le acaricia y de prono llaman a la puerta, Jefrey vuelve a meterse en el armario, quien entra es Frank Booth (Dennis Hopper) un siniestro personaje que continuamente inhala oxígeno, éste golpea a Dorothy y la viola. El muchacho observa toda la escena desde el armario hasta que Frank se marcha, ayuda a la cantante y se da cuenta por una fotografía que está casada y tiene un hijo, comienza a sospechar que los tienen secuestrados y que la oreja que encontró en la maleza pertenece al marido. Ayudado por Sandy, el muchacho metido a detective irá descubriendo el horror de un mundo lleno de personajes siniestros y perversos, en el que hay implicado además algún agente de policía. .

     
      No exagero al escribir que TERCIOPELO AZUL es una de las mejores películas de las últimas tres décadas, además de ser en la que mejor queda reflejado el inquietante universo visual y narrativo de su autor. En la aburrida monotonía de Lumberton, pequeña comunidad donde nunca pasa nada, el terror anida y toma forma hasta hacer palidecer a quienes creen vivir su existencia en un remanso de paz. El sentido de lo malsano magistralmente representado por el psicópata asmático Frank Booth, la noche que abre caminos por donde deambulan almas perversas, en tremendo contraste con el día, de mañanas radiantes y luminosa armonía, como una balanza oscilante entre la luz y las tinieblas. Más allá del crepúsculo despierta todo un cosmos subterráneo de turbios manejos, de violencia desatada, dotando de intensidad dramática los actos heroicos, desnudando las pasiones más sádicas.


     
      Pero, BLUE VELVET es también una película de amor, el tierno y juvenil de Jefrey y Sandy; el extraño magnetismo que Dorothy ejerce sobre Jefrey, aumentando su caudal de excitación, encendiendo una llama de deseo entre las brumas; la relación enfermiza y viciosa del sádico Frank, que le hace comportarse como un niño diabólico, buscando el clímax prohibido de fantasías incestuosas (“papaíto entra en casa, papaíto entra en casa”, susurra el jodido salvaje cuando está encima de una asustada Dorothy), delirios de una mente enferma que nacen de la vejación y el dolor infringido a la cantante de belleza cautiva. Lynch nos hace navegar por las dos orillas del río, por la superficie y lo subterráneo, luz y sombras del averno, espacios paralelos de expresiones diversas, sensaciones múltiples y misterios ocultos. Con una magnífica puesta en escena, una admirable descripción de ambientes y personajes, creando un estilo propio de gran atractivo plástico y desbordante imaginación, regalando para la posteridad, a todos esos filósofos de las emociones y las pesadillas, la frase más sórdida, inquietante y lapidaria de la historia del cine pronunciada por la cantante sufriente: “Ahora llevo dentro tu enfermedad”. La película ganó el Premio al Mejor Film en el Festival de Sitges´86.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario