Se cierra el círculo
“GLASS” êêêê
DIRECTOR: M.
NIGHT SHYAMALAN.
INTÉRPRETES: JAMES MCAVOY, BRUCE
WILLIS, SAMUEL L. JACKSON, SARAH PAULSON, SPENCER TREAT CLARK, ANYA TAYLOR-JOY
GÉNERO: THRILLER / EE.UU. / 2018 / DURACIÓN: 129 MINUTOS.
Múltiple fue la mejor
película de M. Night Shyamalan desde
El
protegido, un film que fluctuando entre el drama desgarrador, el terror
sobrenatural y el thriller psicológico, se impone como un proceloso viaje a los
más recónditos pasadizos de una mente laberíntica y fracturada, en donde anida
la más letal y poderosa de las criaturas. En en el punto donde lo dejó Múltiple,
en Glass
seguimos los pasos de David Dunn
(Bruce Willis) que busca el rastro de la figura superhumana de La Bestia (James McAvoy) en una serie
de encuentros puntuales. En la sombra, Elijah
Price (Samuel L. Jackson) parece emerger como una figura clave que conoce
los secretos de ambos.
En una magnífica pirueta narrativa, Shyamalan
conecta El Protegido y Múltiple para armar el andamiaje de
este cierre de la trilogía Unbreakable con evidente cálculo. La fusión de los
universos de la primera, con su atractiva relectura del mundo de los
superhéroes, y Múltiple, con las escindidas personalidades de Kevin, confluyen
en Glass
con un riesgo asumible para alguien que como Shyamalan tiene un modo tan
peculiar y tortuoso de entender el fantaterror. Y aunque el resultado no está a
la altura de aquel film primigenio de la trilogía protagonizado por Bruce
Willis como el Protector y Samuel L. Jackson encarnando al hombre de los huesos
de cristal, podemos concluir que toda la estructura escénica y narrativa está
construida con emocionante coherencia, revisitando el universo de los superhéroes
desde una mirada oscura que sirve de introspección sobre sus propias obsesiones
artísticas.
El
director de origen indio, encierra a sus personajes (El Protector, La Horda y
Don Cristal) en una institución psiquiátrica y a base de primeros planos
incisivos que parecen mirar al espectador, realiza un estudio psicológico sobre
los intrincados laberintos mentales de los protagonistas, y dentro de una
atmósfera sobrenatural, explorar los extraños comportamientos de la sociedad y
la condición humana, en donde lo excepcional se toma como una anomalía y se
aplaude el triunfo de lo mediocre.
Con una inquietante fotografía
de una Filadelfia húmeda e industrial e ideada más como un tributo a esas dos
obras anteriores y al poder sugestivo del cómic, Glass es una muy buena
culminación de la trilogía, en donde se intenta buscar alguna explicación
racional a los delirios y traumas infantiles del trío de personajes
protagonistas. Buscar en su pasado para hallar la génesis y motivaciones de
unas personalidades nada comunes. En
esos tres días que dura la consulta de la doctora interpretada por Sarah
Paulson (el mayor hilo de conexión de las tres entregas), debe estar perfilado
el diagnóstico. Y en el proceso, la siempre recurrente lucha entre el bien y el
mal, el penoso itinerario vidas rotas y espejos fragmentados, que alimentan
egos hasta la letal condena, y con ella, la salvación. Shyamalan cierra el
círculo de la mejor manera posible.
Es una extravagancia, como sin duda también lo era "El protegido". Pero, eso sí, narrada con elegancia y mucha convicción.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues "El Protegido" es mi película favorita de Shyamalan. Yo creo, que es una muy buena culminación de la trilogía.
ResponderEliminarUn abrazo.